CLUB DE LECTURA "JOSÉ BECEIRO"

                    

Buenos días. Comenzamos un nuevo curso y retomamos las sesiones presenciales de nuestro Club de Lectura de Adultos "José Beceiro". Nos reuniremos en la biblioteca un lunes al mes a partir de las 16:00 horas. La primera sesión, celebrada el pasado 18 de octubre, estuvo dedicada a las lecturas del verano: Darío a diario, poemario de Xela Arias y La ternura, comedia de Alfredo Sanzol.

Darío a diario, libro publicado en 1996 y dedicado a su hijo, es un homenaje de Xela Arias a la maternidad desde la desmitificación. Inscrita en la generación poética de los 80, Xela Arias participa del interés por situar la poesía gallega dentro de las corrientes estéticas universales, superando el costumbrismo y la poesía social y asumiendo su compromiso con el individuo, con temas y rasgos que la convertirán en voz precursora de las poetas gallegas de la década de los 90, como Yolanda Castaño y Olga Novo. Xela Arias, protagonista del Día das Letras Galegas en 2021, explicó la motivación que le impulsó a escribir el poemario: "Darío a diario non naceu coa vocación de ser o que hoxe é: un libro encadernado e público. Foi, no seu principio, a necesidade imperiosa de explicarlle ao meu fillo o manifesto íntimo e interno de intencións maternas nas que el mesmo, polo feito de existir, me obrigaba a moverme; o compendio de contradicións que a maternidade me provoca". Su hijo, que actualmente tiene 25 años, ha comentado sobre la obra: "Unha vez fun colléndolle distancia, entendín que a obra é unha explicación de como vivir a maternidade sen grandes imposicións, non de control, senon de axuda, de poñerse a disposición, camiñar xuntos sen influír no devir do outro". También destacó la libertad, como uno de los temas protagonistas del libro y de toda la obra de la poeta de Sarria: "É unha ollada de que o máis importante é acadar a liberdade, pero esa liberdade nunca vén dada, sempre hai que poñer os medios e traballar en acadala". La obra consta de poemas breves, pero con gran carga emocional. Como podemos leer en la reseña de la Real Academia Galega, "Nesta composición podemos apreciar algunhas das características que a crítica salientou na escrita de Arias: a referencia á realidade inmediata e cotiá na escolla dos temas, a sinxeleza na composición e o emprego dunha lingua accesible". La experiencia de la maternidad también fue decisiva en la realización de otra obra, publicada póstumamente, Non te amola!, integrada por cuentos infantiles, y de la que su hijo explica: "Si, o certo é que ela quería facer algo máis que poesía, quería xuntar eses contos infantís que non puido publicar no seu momento e agora por fin puidemos editalo".

La segunda lectura del verano fue la exitosa comedia La ternura, del premiado dramaturgo y actual director del Centro Dramático Nacional Alfredo Sanzol.  Estrenada en 2017, es, en palabras de su autor, "una comedia romántica de aventuras" y "se llama La Ternura porque habla de la fuerza y de la valentía para expresar amor. La ternura es la manera en la que el amor se expresa. Sin ternura el amor no se ve. La ternura son las caricias, la escucha, los pequeños gestos, las sonrisas, los besos, la espera, el respeto, la delicadeza". El texto surgió del proyecto de Teatro de la Ciudad, en la que varios directores y actores trabajaron en un proceso de talleres. Eligieron la comedia de Shakespeare, "porque él reúne toda la tradición de la comedia clásica greco-romana, suma la tradición medieval popular, y crea la comedia moderna (junto a Lope de Vega)". El autor navarro explica la elección en los siguientes términos: "En mi caso he leído y releído las comedias de Shakespeare con el objetivo de dejarme impregnar por su estilo, su forma, su atmósfera, sus personajes, sus argumentos, sus trucos y juegos. Al mismo tiempo que hacía esta lectura intensa iba haciendo otras dos cosas: armar el argumento de La Ternura y hacer talleres de improvisaciones con los actores". De hecho, en los diálogos se hace referencia a los títulos de las catorce comedias de Shakespeare. Sanzol propone una suerte de "juego", basado en un argumento en el que están presentes el enredo y los equívocos, y que manifiesta la influencia de La tempestad, Noche de Reyes, Como gustéis, Mucho ruido y pocas nueces y El sueño de una noche de verano. Con un lenguaje cargado de metáforas, y su ritmo ágil, en el que se suceden continuas sorpresas, la comedia logra una factura redonda que culmina haciendo las delicias del espectador.